En México la dinámica de los debates presidenciales ha variado en el paso de 30 años… y dado que está próximo a celebrarse el primer debate presidencial entre los actuales contendientes el próximo 7 de abril, recordemos un poco cómo han sido los debates anteriores y sus niveles de audiencia según la empresa Nielsen IBOPE.
El primer debate tuvo lugar el 12 de mayo de 1994. Los candidatos que participaron fueron Ernesto Zedillo, del PRI, Diego Fernández de Cevallos, del PAN y Cuauhtémoc Cárdenas del PRD y se dejó fuera a los otros cuatro aspirantes. Fue bajo la convocatoria de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT).
Ya se habían instrumentado cambios importantes en materia electoral, comenzando por la creación del Instituto Federal Electoral (IFE), pero aun así la prevaleció la usanza del PRI: la participación del IFE fue marginada y el debate fue organizado por los candidatos y sus asesores. En el “método científico” utilizado como dinámica, hubo esquemas iguales de tiempo para cada candidato y no se permitió el diálogo entre ellos. No obstante, fue sintonizado por 34 millones de televidentes y tuvo un rating de 35 puntos en cadena nacional… pero por primera vez la ciudadanía pudo apreciar de forma más directa las confrontaciones y deliberaciones políticas que estaban reservadas al ámbito privado.
En 2000, hubo dos debates; en el primero participaron todos los candidatos y otro en el que sólo participaron los tres candidatos del puntero Francisco Labastida del PRI, Vicente Fox del PAN, Cuauhtémoc Cárdenas del PRD.
Ya el IFE podía legalmente organizar debates, pero era a petición de los partidos políticos y sus candidatos designados… y la responsabilidad del IFE era únicamente difundir. Durante los debates hubo cuatro intervenciones de tres minutos y dos intervenciones de dos minutos para concluir. No obstante, el rating en cadena nacional fue de 12.6 y a pesar de las restricciones hubo intercambio de palabras y acusaciones entre los contendientes.
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En el 2006 hubo dos debates. En ellos participaron Patricia Mercado, del Partido Alternativa Socialdemócrata, misma que hoy es Senadora de Movimiento Ciudadano, Roberto Campa por parte del partido Nueva Alianza, Roberto Madrazo por parte del PRI y Felipe Calderón por el PAN, notándose la ausencia del actual Presidente y entonces candidato del PRD Andrés Manuel López Obrador en el primero de los debates.
Se trató de nueva cuenta de ejercicios acartonados, ya que no dejaron de ser solicitados por los candidatos, a pesar de que la dinámica fue más rápida que en los anteriores debates. Ambos debates tuvieron en promedio un rating de 18.3 televidentes.
En el 2012 hubo también dos debates, con la participación de nuevo del actual Presidente, Josefina Vázquez Mota del PAN, Enrique Peña Nieto del PRI y Gabriel Quadri, de Nueva Alianza y tuvo algunas mejoras en su encuadre, como permitir ver al candidato que no tuviera uso de la palabra si estaba siendo aludido por el orador y permitirles usar material audiovisual, sin embargo la dinámica terminó siendo confusa y no dio lugar a un adecuado contraste de ideas. El segundo de estos rompió record de audiencia con 22,6 puntos a nivel nacional.
Ya para el 2018, los tres debates realizados fueron regulados le ley electoral y organizados por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE). Participaron el actual Presidente, Ricardo Anaya del PAN, José Antonio Meade del PRI y Jaime Rodríguez Calderón (El Bronco).
Se mantuvo una audiencia superior a los 10 millones y el último debate alcanzó 12.94 puntos de rating en cadena nacional y por supuesto: en internet, en Facebook con 3 millones de visualizaciones y Periscope, con 12 mil.
En este debate de 2018, la ciudadanía pudo participar a través de redes sociales; se abrió convocatoria para preguntar los contendientes temas específicos para el país y las mismas preguntas fueron analizadas por instituciones de prestigio, a fin de que los moderadores del debate puedan abrir los segmentos de cada bloque.
Y al igual que en dicho debate, este 7 de abril se espera un ambiente más relajado en cuestión de dinámica y formato para los actuales candidatos a la presidencia Claudia Sheinbaum por parte del oficialismo, Xóchitl Gálvez de la coalición PRI –PAN-PRD y Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, pero sobre todo que la ciudadanía pueda fundamentar mejor su voto.
En pleno 2024 ya sabemos que los debates presidenciales son un sano ejercicio de la democracia, pero esto no fue de la noche a la mañana, sino un logro que se ha perfeccionado con el tiempo gracias las autoridades organizadoras que han trabajado por regularlo y por supuesto, a la participación ciudadana.. No se lo pierdan, que estoy seguro de que moverá el tablero electoral.